Misión en Islandia: Nido de dragón

Caballeros, permítanme desclasificar una misión que tuvo lugar en el verano de 1885 en la ladera del monte Snæfellsjökull, en la remota Islandia.

Se trata del descubrimiento de un nido de dragón. Sí, sí, han leído bien. De dragón.
Lo cierto es que la existencia de dragones ha permanece en secreto ya desde 1864. En aquella ocasión, varios meses después de la expedición llevada a cabo en Islandia por el Linderbrock siguiendo los pasos del alquimista Saknussemm, se produjeron los primeros avistamientos de dragones por la zona. Con éxito, el Servicio Secreto envío al capitán Charles Gidmore a la zona para localizar y dar caza a todos los ejemplares que, por suerte, no superaban la media docena.
La repentina aparición de tan exótica especie se achacó a la violación provocada por la expedición en su delicado hábitat. Si bien es cierto que los diarios de la expedición no mencionaron para nada avistamientos de este tipo de criaturas, sí es lógico creer que su visita al centro de la Tierra provocó graves daños en el ecosistema.

Y, en 1885, la situación se repitió. Tras una violenta erupción volcánica seguida de fuertes temblores de tierra, los dragones volvieron a aparecer en la zona, pero esta vez con el añadido de que los dragones han tenido tiempo, antes de ser descubiertos, de asentar un nido en superficie.
En esta ocasión, la enviada a la zona fue la agente Lisbeth Swift. Sin embargo, la política de la agencia ha cambiado ligeramente. En esta ocasión no todas las bestias fueron sacrificadas, a pesar de que solo tratan de sobrevivir. La agente Swift recibió la orden de trasladar los ejemplares nonatos a los laboratorios de Ciencias Naturales de Londres.
Hete aquí, pues, uno de esos ejemplares.



El proceso de desarrollo de la criatura es ralentizado cuidadosamente mediante refrigeración controlada pero constante en la zona, manteniéndolo aletargado para evitar su inminente eclosión sin causarle daños. Esto nos permite mantenerlos con vida al tiempo que podemos estudiarlos y aprender más sobre esta nueva especie a la que hemos dado en llamar draco rex.


Esta última foto fue tomada en el inminente momento de la eclosión. Nada más se pudo hacer para evitarlo. El resto, es información confidencial.

Si desen ver todo el álbum: https://picasaweb.google.com/yosurc/ThisIsGreenpunk# En este álbum iré metiendo mis desvaríos Greenpunk.

Esta última me la guardo para un posible banner futuro.

Lord Boffin:

Me es sumamente grato ver que han tomado captura de los dragones, que como Ud. dice pueden causar un imbalance ecológico. Ya fue hace bastante tiempo que se había observado la expulsión de ciertos especímenes de Draco maleficus del mismo volcán, sobre todo en una de las ultimas expediciones aéreas que hice abordo del USAS Orca. Desgraciadamente no pudimos acercarnos al volcán a tiempo para capturar dichos especímenes, a razón de que para evitar daño a nuestras maquinas, nuestra trayectoria tuvo que circumvalar la "pluma" de cenizas eruptas del Snæfellsjökull y tardamos un día competo en arribar a las faldas del volcán.

Quedo de Ud.
J. Wilhelm

Draco maleficus. No quiero ni tener que cruzarme con él.

A ver si logro desclasificar todos los archivos al respecto y hacerlos públicos para todo el mundo.

Quedo de ud., caballero.

Se lo agradezco, caballero. Aquí en la Universidad de Texas tenemos un especimen fosilizado del Draco maleficus:
http://brassgoggles.co.uk/forum/index.php/topic,24935.msg570871.html#msg570871

Pero podriamos beneficiarnos mutuamente con el intercambio de información en nuestros archivos. Con su permiso, le voy a referir su número de contacto al Dr. D. Livingstone en el departamento de paleo-cryptologia.

Quedo a su servicio,
J. Wilhelm